La realidad supera la ficción (parte 2)

Ayer leía en Twitter: "Está España como para perderse un capítulo". No creo que otra frase pueda resumir mejor el paisaje con el que nos vamos topando, progresivamente. Las caretas "demócratas" empiezan a caer y las viejas caras se revuelven histéricas. Un conocido hacía una maravillosa comparación entre la situación política actual nacional y Juego de Tronos, he de reconocer que en la metáfora todo tenía sentido, incluso más que en la vida real...

Dos días, dos días han tardado -la mayoría- de nuestros políticos en empezar a hacer el ridículo, batirse en retirada o empezar a sufrir amnesia sobre lo que prometieron o no en sus programas. Antes me interesaba la política mucho más que ahora, he de reconocer que llevo unos meses más desconectada de lo que me gustaría. Pero ante los últimos acontecimientos no puedo evitar pegarme a la pantalla para no perderme nada, lo que habría dado Berlanga por presenciar semejante opereta, le daba para una triología, mínimo... Le veo revolviéndose en la tumba.

¿CASUALIDAD? NO LO CREO

Desde la aparición a lo guardián de las estrellas que hizo Marcos Benavent a las propuestas de la Espe, este país es un no parar. Mientras la mano derecha del Rus -del que nada se sabe- parecía salido de un viaje de ácido en mal estado, asegurando que "tol mundo está en movidas" y que él lo que era es "un yonki del dinero". Yo creo que esto da para un Callejeros VIP, entre él y Espe tienen medio reparto resuelto los de Mediaset.

¡Qué llegan los soviets!Debo frenar al
centro radical comunista. Mi planeta me necesita.

La lideresa compadeció ayer dos horas tarde -ni que los periodistas tuviesen algo más importante que hacer- para anunciar que haría lo que fuese para impedir que la izquierda radical bolivariana capitaneada por Podemos gobernase Madrid, vamos, que olvidó tomar su medicación esa mañana. Su estrategia consistía en ofrecer la alcaldía a Antonio Miguel Carmona (PSOE). El buen hombre estuvo a punto de negociar con ella si se tenía en cuenta lo de las naumaquias en El Retiro, pero al final parece que el buen hombre lo pensó mejor y respondió con un NO rotundo. Ya es triste mendigar al PSOE, pero más triste es que Carmona te diga que no. Espe, ¿más bajo no se podía caer? Especialmente maravilloso fue el momento en el que comparó la asamblea de Madrid con el Club Bildelberg, asegurando que sería un perfecto trampolín para cambiar el orden democrático occidental tal y como lo conocemos. Vaya, interesante que semejante revolución antidemocrática radical la quiera capitanear Carmena, quien lleva toda su vida luchando por la democracia en este país.  Luego a Espe ya se le bajaron los humos y que ya si eso, si dejábamos atrás el tema de los distritos convertidos en soviets quizás se pudiese llegar a un acuerdo de centro-centro-extremo-de derechas-radical-democrático-comunista-nazi. Mientras tanto Cifuentes se quita la careta y nos revela lo que realmente ha sido siempre, una progre, casi una activista antidesahucios, con sus tatuajes y sus cafés del Starbucks. En fin, que dejamos al Mundo Today sin trabajo.

En Valencia la cosa sigue, como para darles de comer aparte. Se está hablando de organizar un concurso para determinar quien ocupa la presidencia de la Generalitat, todavía no se sabe si se llamará "Y tu más" o "Yo porque la tengo más grande". Ximo Puig ya lo dejó muy claro anoche en el programa de debate de 24h TVE. Bueno, muy claro tampoco, no es que él sea un señor así como muy de hablar claro y quedar bien en cámara, pero sonreía y como que se fue contento a casa. Pese a haber sacado el peor resultado de la historia del PS-PV él se ve como presidente, como si hay que pactar con Ciudadanos o con el cojo manteca. Nada importa que el partido de Oltra haya triplicado sus escaños y solo les separen unos miles de votos. El señor con menos carisma que un cactus de plástico quiere reinar, ¿y quién somos nosotros para negárselo? 

Por su parte, Izquierda Unida sigue a lo suyo y se da cuenta ahora de que quizás, tal vez y a lo mejor, lo suyo habría sido apostar por la confluencia de fuerzas con otras formaciones de izquierdas como, por ejemplo, Podemos. Ahora es el momento, sin duda, se trata de una propuesta que NO TENÍA NINGÚN SENTIDO antes de las elecciones, pero ahora de repente SI. Un aplauso para Lara y Garzón, a eso se le llama estrategia política.

Que la agitación en Twitter sea lo más parecido que tenemos a una democracia representativa da que pensar, nada importan los resultado de las elecciones ahora. Se trata de un episodio nacional al estilo House of Cards, pero en cañí, con las más burdas estrategias políticas y medio país que todavía no sabe ni a quién ha votado. 

¿Y Podemos, quién piensa en Podemos?